Todos los días renuevo el agua y la comida en los recipientes. – Papá, ya no van a volver– Lila no es optimista, ella casi no recuerda el día en que se marcharon los pájaros. Cada vez somos menos los que recordamos aquella última primavera, las últimas flores, los últimos trinos. Cada vez somos menos los que todavía levantamos la mirada y soñamos con alas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario